Placeres literarios.

Hola amigos, seguro que para muchos de vosotros la lectura es un placer, el leer para mi también es un agradable placer. A los que tenéis la afición y el gusto por la lectura como yo, os dedico estas líneas:

Leer un libro, es algo que nunca nos es esquivo, a pesar de este tiempo de vida trepidante, el apasionado del negro sobre blanco siempre encuentra un momento propicio para esta confesable pasión, la literatura.

Hoy quiero hablaros de dos libros que estoy leyendo y alternando sin caer en la infidelidad. Este mundo tiene esa permisividad, si es nuestra voluntad, internarnos indistintamente, ahora en las páginas de uno y al instante dejarnos llevar por el argumento de otro. En este caso es entendible, por que estoy leyendo “Una forma de resistencia” de “Luis García Montero”. Este libro tiene la peculiaridad que puedes abrirlo por donde quieras, pues el argumento va esbozado en temas breves así que nunca se pierde el hilo. En estos momentos estoy en la página 169, La nieve. García Montero, salta de la política, lo personal, lo social y esos pequeños objetos que nos son tan necesarios en nuestra vida cotidiana. Todo ello, lo mueve con agilidad, mordacidad y pequeñas pinceladas personales, va de lo simple de un despertador o una butaca a temas mas profundos, y aquí una pincelada de él, que os regalo para que comprendáis que las hojas de este libro son sabrosas y coloridas. Dice así García Montero:

“Los banqueros cuentan sus beneficios, los políticos sus votos y los poetas sus cosas. Cuentan y recuentan las cosas en las que se quedó enredada su vida.”

Como veis este autor del que últimamente he leído otra creación suya sobre mi paisano el fantástico poeta asturiano “Ángel González” Biografía real que además del testimonio de una vida, el libro tiene unas fotos entrañables, que para los que admiramos al poeta Ángel González ya fallecido, son un tesoro. Me encanta este escritor Luis García Montero, nunca defrauda. Estos días también navego por las paginas del autor “Vladimir Nobokov” autor del libro, "Curso de literatura rusa", del que a veces necesito salir para volver a sumergirme en su ruta con fuerzas renovadas. Pues exige concentración, ya que no deja resquicio a la distracción pues analiza autores de peso como Chéjov, Gógol, Gorki y Dostoyevski su ruta por la literatura de estos autores exige al lector tranquilidad y quietud para absorber tan importante sabiduría. Un excelente Autor.

Próximamente me adentraré en otro de sus libros, “Curso de literatura europea”